Si hay dos fortalezas que representan la historia defensiva de Cádiz, esas son el Castillo de San Sebastián y el Castillo de Santa Catalina. Estas construcciones, ubicadas estratégicamente en la costa gaditana, han sido testigos de siglos de batallas, conquistas y leyendas.
🏰 Castillo de San Sebastián: La Fortaleza del Mar
Situado en un islote al final de un paseo que se adentra en el Atlántico, el Castillo de San Sebastián es una joya arquitectónica que data del siglo XVIII, aunque su origen se remonta a una antigua torre de vigilancia del siglo XV. Su posición estratégica lo convirtió en un punto clave para la defensa de la ciudad frente a ataques marítimos.
Uno de los aspectos más fascinantes de esta fortaleza es su misteriosa relación con la mitología. Se dice que en este mismo islote existió un antiguo templo fenicio dedicado a Moloch o a Kronos, lo que otorga al lugar un aura de misterio y leyenda.
Hoy en día, el castillo es un espacio cultural donde se celebran eventos, exposiciones y conciertos, ofreciendo además una de las mejores vistas panorámicas del océano y de la ciudad.
🏹 Castillo de Santa Catalina: Guardia de la Ciudad
A diferencia del Castillo de San Sebastián, el Castillo de Santa Catalina se encuentra sobre tierra firme, en un promontorio que domina la playa de La Caleta. Construido en el siglo XVI tras el ataque anglo-holandés a Cádiz en 1596, esta fortaleza de planta estrellada fue clave en la estrategia defensiva de la ciudad.
Uno de los elementos más característicos de este castillo es su capilla, dedicada a Santa Catalina de Alejandría. Con el tiempo, la fortaleza dejó de tener un uso militar y se convirtió en una prisión hasta el siglo XX.
Actualmente, el Castillo de Santa Catalina es un espacio cultural abierto al público, donde se realizan exposiciones, talleres y actividades artísticas. Pasear por sus murallas y patios es sumergirse en la historia y disfrutar de un rincón tranquilo con unas vistas espectaculares.
🏞️ Un Recorrido por la Historia de Cádiz
Visitar los castillos de San Sebastián y Santa Catalina es adentrarse en la historia de la ciudad y sus sistemas de defensa. Ambos son testigos de siglos de resistencia frente a piratas, ejércitos invasores y transformaciones culturales.
Si estás en Cádiz, no dudes en recorrer estas fortalezas, contemplar sus vistas y dejarte llevar por las historias que sus muros guardan. ¡Te sorprenderán!